martes, 22 de agosto de 2017

Dios



Este es Dios según Baruch de Spinoza:


Dios hubiera dicho:

" Deja ya de estar rezando y dándote golpes en el pecho! Lo que  quiero que hagas es que salgas al mundo a disfrutar de tu vida.

 Quiero que goces, que cantes, que te diviertas y que disfrutes de todo lo que he hecho para ti.

 ¡Deja ya de ir a esos templos lúgubres, obscuros y fríos que tú  mismo construiste y que dices que son mi casa.

Mi casa está en las montañas, en los bosques, los ríos, los lagos, las playas. Ahí es  en donde vivo y ahí expreso mi amor por ti.

 Deja ya de culparme de tu vida miserable; yo nunca te dije que había nada mal en ti o que eras un pecador, o que tu sexualidad  fuera algo malo.

 El sexo es un regalo que te he dado y con el que puedes  expresar tu amor, tu éxtasis, tu alegría. Así que no me culpes a mí  por todo lo que te han hecho creer.

 Deja ya de estar leyendo supuestas escrituras sagradas que nada  tienen que ver conmigo. Si no puedes leerme en un amanecer, en un  paisaje, en la mirada de tus amigos, en los ojos de tu hijito...  ¡No me encontrarás en ningún libro!

 Confía en mí y deja de pedirme. ¿Me vas a decir a mí como hacer mi  trabajo?

 Deja de tenerme tanto miedo. Yo no te juzgo, ni te critico, ni me enojo, ni me molesto, ni castigo. Yo soy puro amor.

 Deja de pedirme perdón, no hay nada que perdonar.  Si yo te hice... yo te llené de pasiones, de limitaciones, de placeres, de sentimientos, de necesidades, de incoherencias...  de libre albedrío ¿Cómo puedo culparte si respondes a algo que yo puse en ti? ¿Cómo puedo castigarte por ser como eres, si yo soy el que te hice? ¿Crees que podría yo crear un lugar para  quemar a todos mis hijos que se porten mal, por el resto de la eternidad? ¿Qué clase de dios loco puede hacer eso?

 Olvídate de cualquier tipo de mandamientos, de cualquier tipo de leyes; esas son artimañas para manipularte, para controlarte, que sólo crean culpa en ti. Respeta a tus semejantes y no hagas lo que no quieras para tí. Lo único que te pido es que pongas atención en  tu vida, que tu estado de alerta sea tu guía.

 Amado mío, esta vida no es una prueba, ni un escalón, ni un paso en el camino, ni un ensayo, ni un preludio hacia el paraíso. Esta vida es lo único que hay aquí y ahora y lo único que necesitas.
 Te he hecho absolutamente libre, no hay premios ni castigos, no hay pecados ni virtudes, nadie lleva un marcador, nadie lleva un registro.

 Eres absolutamente libre para crear en tu vida un cielo o un infierno.

 No te podría decir si hay algo después de esta vida, pero  te puedo dar un consejo. Vive como si no lo hubiera. Como si esta fuera tu única  oportunidad de disfrutar, de amar, de existir.
 Así, si no hay nada, pues habrás disfrutado de la oportunidad que te di.
 Y si lo hay, ten por seguro que no te voy a preguntar si te portaste bien o mal, te voy a preguntar ¿Te gustó?... ¿Te divertiste?...  ¿Qué fue lo que más disfrutaste? ¿Que aprendiste?...

 Deja de creer en mí; creer es suponer, adivinar, imaginar. Yo no quiero que creas en mí, quiero que me sientas en ti. Quiero que me sientas en ti cuando besas a tu amada, cuando arropas a tu hijita, cuando acaricias a tu perro, cuando te bañas en el mar.

  Deja de alabarme, ¿Qué clase de Dios ególatra crees que soy?

Me aburre que me alaben, me harta que me agradezcan. ¿Te sientes agradecido? Demuéstralo cuidando de ti, de tu salud, de tus relaciones, del mundo. ¿Te sientes mirado, sobrecogido?...  ¡Expresa tu alegría! Esa es la forma de alabarme.

 Deja de complicarte las cosas y de repetir como perico lo que te han enseñado acerca de mí. Lo único seguro es que estás aquí, que estás vivo, que este mundo está lleno de maravillas.   ¿Para qué necesitas  más milagros? ¿Para qué tantas explicaciones?

 No me busques afuera, no me encontrarás. Búscame dentro... ahí estoy, latiendo en ti.


 Spinoza

lunes, 21 de agosto de 2017

Tres de tres



Este fin de semana, concretamente el domingo, me dediqué a hacer una de las cosas que más me gusta… ver buen cine. Para ello no pude hacer mejor selección que la trilogía tributo a mi apreciado Ricardo Darín .

Darín es un actor argentino que desde que vi su primer trabajo le he apreciado por su calidad, que bajo la dirección de Juan José Campanella nos entrega trabajos de muy buena hechura.
El maratón dominical corrió en el siguiente orden: Primero El Mismo amor la misma lluvia, seguida por El secreto de sus ojos, y finalmente Luna de Avellaneda. No tiene importancia alguna el orden, simplemente fue como llegaron a mi cabeza.

Tres dramas con salpicones románticos que nutren esa parte de mi cursilería que tal vez venga arrastrando como uno de mis defectos mas arraigados.

El mismo amor la misma lluvia, nos presenta la larga vida de un escritor que tiene ilusiones y talento pero se ve consumido por la vida diaria, mientras conoce al amor de su vida, que sin el menor juicio lo desperdicia como se desperdicia lo que mas queremos.
“Claro que lo iba a pensar por un lado una mujer hermosa, honesta, apasionada, dispuesta a dedicar cada segundo de su vida a hacer de mi un hombre superior. Por el otro, una casa fría, relaciones huecas, seguir siendo siempre la misma persona. ¿Cómo no lo iba a pensar? Y la verdad es que muy bien no lo pensé.” 

El secreto de sus ojos quizá sea mi favorita, un triller policial que entretiene de principio a fin, en donde el amor secreto tiene mucho lugar. Un empleado del juzgado sin mucho porvenir y una juez con todo lo que el carece, en medio un crimen que no se acaba nunca.
- Aparece la tipa por la puerta y vos ya tenés preparado un piropo para que ella se derrita. ¿Cómo hacés?
- Lo que pasa Benjamín es que vos me ves vestido de sapo cuando en realidad soy un príncipe encantado.  Para mí es más fácil Benja, yo no estoy enamorado.

Luna de Avellaneda más que drama esto es una comedia dramática, la lucha de los miembros de un club deportivo condenado a la quiebra para evitar que el mismo sea embargado por causas de sus deudas con el gobierno. El problema del club es solo el pretexto para presentarnos la historia de algunos de los miembros del club, un pelotudo que se está divorciando, un alcohólico que se empecina en echar todo a perder, y una divorciada que lucha sin mucho éxito por hacer su vida un poco menos miserable.

“Yo no fracase solo y si no es así, si yo me fui a pique solo y vos estando a un lado mío no hiciste un carajo para ayudarme tengo que pensar que sos una hija de puta”.

En esta trilogía hay un extra, está disponible online en YouTube. Yo se las recomiendo.