Cosas random que me gustan (mucho):
Que mi hija de UK me mande fotos
Despertar en la madrugada, estirar la mano y sentir a mi novia junto.
Ver a mi hija de MXLI feliz.
Mi cumpleaños (esto casi casi se puede considerar como publicidad)
EL ÚNICO SANTO QUE PIDE MILAGROS
Cosas random que me gustan (mucho):
Que mi hija de UK me mande fotos
Despertar en la madrugada, estirar la mano y sentir a mi novia junto.
Ver a mi hija de MXLI feliz.
Mi cumpleaños (esto casi casi se puede considerar como publicidad)
Así rezaba la letra de una canción de la época de los tríos, los musicales, los amorosos suceden en la actualidad.
¿Quieren saber que se siente que tu hija se vaya a estudiar un doctorado a Reino Unido?
Eso, exáctamente.
Evidentemente que es normal, no soy ni el primero ni el último padre que tiene una hija estudiando en el extranjero (aunque si creo que soy el más feliz y orgulloso). Pero si me preguntan, y si no me preguntan también se los diré, pensé que sería menos severo mi sufrir. El fin de semana que se fue, me quedó claro que mi presupuesto emocional se había quedado corto. Yo pensé que una parte de mi se iría con ella, pero creo que se llevó mucho más. Que conste y que quede anotado que no escribo estas líneas tirado en el suelo y sufriendo desconsoladamente. Solo narro mis sentimientos iniciales.
El amor es un sobreviviente que busca la manera salir de cualquier compleja situación, y busca los caminos para mantenerse vivo. Y creo que el amor de mi hija y mío no ha hecho otra cosa distinta. Ahora es el Whatsapp y la videollamada lo que nos mantiene unidos, unidos y amorosos.
Nada es mas gratificante que ver a los hijos progresar, crecer, madurar y aprender. Ella lo está haciendo de forma maravillosa, y yo aprendo a disfrutar su crecimiento y a sufrir solo lo necesario.
Intento recordar una frase que tiene que ver con la vida y su sentido del humor, pero les voy a quedar mal esta vez, porque la memoria no me quiere dar para más.
El caso es que hoy estaba pensando que la vida, el universo, el mundo, tienen un sentido del humor muy ácido, no hablo de Dios, porque no quiero politizar este blog. Por eso sólo menciono estas opciones.
Esto viene a cuento porque hoy estaba en mi oficina, y fui a mi pequeña "cocina" por una botella de agua, por cierto cada que tomo una botella me acuerdo de mi hija y su enojo por mi cultura del desperdicio. Tengo un paquete de unas 24 botellas de agua que compré en Smart & Final, del cual ya he consumido poco mas de la mitad de botellas. Y hoy que fui por un par me percato que dentro del paquete, en el espacio vacío que dejaron las 12 o más botellas faltantes, yacía bien muerto un grillo, pero no crean que un tierno grillito, era como una mutación gigante de un grillo, exagerando un poco diría que era como un Alien. Como saben con los insectos me pasa igual que con Satanás (#YaSabenQuién), me producen un inmenso asco. Como comprenderán, la misión de tomar una botella de agua se abortó. O mejor dicho, se pospuso para un mejor momento. Una disculpa por el pequeño brinco del tiempo, empecé hablando de que todo pasaba en el presente y me brincaré al futuro, porque al día siguiente, ya con conocimiento de causa y después de pensarla bastante, me decidí a quitar esa cosa de mis botellas de agua, y fui, armado con una pala para jardín y mucho valor. La dichosa operación se llevó a cabo como marca el manual, sin ver, más de lo necesario. Así que removí el cadáver y procedí a lavar todas y cada una de las botellas de agua, mientras pensaba ¿Porqué la vida me pone estos desafíos?
Sanescrin sufre.
Ve las cosas que te gustan, no veas lo que no te gusta.
Eso contribuirá a tu felicidad. Y si no es así, entonces mejor ve al psicólogo.
La vida es lo mas hermoso que pueda existir. Es maravilloso poder disfrutar de todo lo bonito que nos ofrece día a día, aunque tiene su lado siniestro, ese lado que me hace pensar y decir que la vida es una desgraciada, porque nos quita lo que más queremos.
En lo personal me ha quitado casi todo lo mas valioso que se le puede quitar a una persona, me quitó a mi madre, a mi padre, y a dos de mis hermanos. Justo hace unos días platicaba con mi hija Brenda, y le comentaba que prácticamente perdí a mi madre y a mi padre dos veces. Porque justo mis hermanos que fallecieron en su momento fueron como padre y madre para mi y mis hermanos.
Si, ya se que este post empezó medio bastante trágico, pero no crean por ningún motivo que lo estoy escribiendo y colocándome una soga al cuello, para nada, este post lo escribo desde la serenidad de mi oficina, y se me ocurrió porque hace unos minutos hablaba con un cliente, y me comentaba con notoria tristeza que su madre está en el hospital, prácticamente a la espera de fallecer.
De corazón le dije, le aconsejé, que sin importar la condición de su mamá, la abrace y le diga todo lo que la ama y lo mucho que le agradece lo que haya hecho por el. Ese creo que es el mejor consejo que alguien que ya ha vivido esa experiencia puede dar.
No me juzguen como loco o insensible o lo que se les ocurra juzgarme si digo que de alguna manera me alegro de ya haber pasado por eso. Obviamente no es una alegría de que mis padres hayan fallecido, sino es cierto descanso de haber pasado por ese trauma tan cruel y haber sobrevivido a ello.
En mi caso no ha sido fácil transitar el camino de la aceptación y la superación de la pérdida. Me llevó años superarlo y pagué precio emocional por ello.
Ahora recuerdo a mis padres con infinito amor, con alegría. Y cada que veo a algún amigo perder a sus padres, o saber que ellos están gravemente enfermo siento dolor por su situación, por verlos entrar en ese túnel negro que en momentos parece interminable. Se por experiencia lo que van a sufrir, pero también pienso que como yo, lo van a superar y en algún momento les regresará la alegría al cuerpo.
La edad adulta consiste en hacer una gran diversidad de cosas según las capacidades y metas de cada quien, pero hay una constante de la cual no escapa nadie: envejecer.
Cuando estaba casado, la Karina y yo teníamos una frase para definir el súbito envejecimiento de alguien, decíamos "Ya le entregaron su cajita de años" y aplicaba para aquellas personas que no veías en unos años y cuando la volvías a ver lucían notoriamente envejecidas.
Por experiencia propia, les puedo comentar y casi advertir que el envejecimiento llega tal cual lo teorizábamos la Karina y yo, por paquetes. Cada situación difícil que te toca enfrentar es un combo de arrugas, canas y dolores que te tendrás que vestir. Y claro, como todos los combos hay chicos, medianos y a lo grande. Los grandes normalmente tienen que ver con los hijos. Y tiene lógica, nada amamos mas que a nuestros hijos, y nada nos duele más que ellos.
El viernes pasado fui a una comida de trabajo en el Mochomos (vayan, la neta). Todo transcurrió excelente, la reunión concluyó, agradecí a los asistentes y me retiré. Al salir del lugar pasé por una mesa en donde un grupo de señoras departía alegremente. Mi mirada se centró en un rostro que me pareció familiar, en en par de segundos la recordé y el arco de sus cejas me indicó que ella a mi también. Trabajamos juntos hace 20 años, ella era una joven y guapa (very) arquitecta. Seguro estoy que sigue siendo arquitecta, y aún conserva un toque de belleza. Su juventud se quedó en mi recuerdo.
Tarde o temprano la paquetería llega.
En algún lugar leí, o vi o escuché que los funerales no son hechos para los difuntos, sino para los familiares y amigos del infortunado o afortunado, depende las circunstancias.
Coincido totalmente con esa idea. El difunto ya se fue, nada de lo que suceda ahí será para el, servirá para honrarlo en todo caso, pero en ausencia. Por eso en definitiva, todo lo bonito que quieran hacerle o decirle a alguien, háganlo cuando el aún tenga plena conciencia. No digo que después será demasiado tarde, también sirve de algo decirle al difunto cuanto lo amas, y como en mi caso , cuando fallecieron mis padres, me acerqué y les di las gracias por todo lo que hicieron por mi. Fue muy bonito, me hubiera encantado poder decírselos en persona, pero ya saben, uno se apendeja.
Bueno, el caso es que a veces pienso en mi funeral, y la neta me da harto sentimiento, no por el hecho de que me vaya a morir, sino porque creo que mi funeral va a ser una gran fiesta, a la que desgraciadamente no voy a ir. La vida me ha dado una hermosa familia, que seguramente en mi funeral no van a dejar de reír, hacer chistes y llorar a ratos. Pero mayormente se van a divertir. No los juzguen, así son, así somos.
También tengo maravillosos amigos, que comparten ese gusto por pasarla bien, y no creo que desaprovechen esa oportunidad que el destino les regalará. Mal harían si no se divierten recordando todas las cosas que hemos pasado juntos. Como decíamos en la primaria, chingo mi madre pa si no cuentan el anécdota de mi costilla rota. Quizá y solo quizá, mi sobrina se atreva a revelar el bochornoso mega oso secreto que me aventé en diciembre de 2020. Seguramente alguien mostrará una foto mía, dormido en alguna borrachera. Todos mis buenos amigos tienen una.
En fin, pásenla bien. es todo lo que pido.
P.D. No, no me siento mal. Sólo recordé el tema.