lunes, 9 de abril de 2012

Un favor.

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-Puedo pedirle un favor?
-Pida lo que quiera.
Mirando la luz del semáforo dijo:
-Hace muchos años que no abrazo a nadie.


Este es el fragmento casi final del libro Soldados de Salamina de Javier Cercas, antes que el libro primero vi la película cortesía de Salvador, mi mentor del taller de construcción literaria.
Esta escena bien vale la película, en lo personal me sentí profundamente conmovido por ella, por la forma tan sorpresiva en que lo pide, por el hecho de que muchas veces lo he pensado, los Beatles se equivocaban, a veces no Todo lo que necesitas es Amor sino un abrazo.
Cuantas veces he tenido yo mismo que refugiarme en el abrazo de alguien querido solo para sentir su cariño y asi sentirme seguro. Y cuantas veces he sido refugio de almas ávidas de sentirse amadas, apreciadas o simplemente vivas.
Llegar a unos brazos cariñosos es como llegar al hogar, a la casa materna, a ese lugar en donde no importa de donde vengas ni tampoco lo que hayas hecho ni cuanto tiempo te quedarás, lo que importa es que estás aquí.
Mi abrazo favorito es por mucho el de mis hijas, un abrazo tan puro, amoroso y desinteresado como ninguno, ahí encuentro el principio y el fin de mi vida, el único motivo valido para este absurdo sinsentido que es la vida.
A pesar de no ser alguien con facilidad para el contacto físico creo que bien podria transcurrir mis días abrazando ya sea por necesidad o por consuelo, dando y recibiendo sin cesar. Cuantas veces he necesitado de uno y me he que dado con las ganas solo por no pedirlo, es por eso que ahora no me espero siquiera a pedirlos los tomo sin mediación alguna. La vida marcha rápido como para detenerse en cosas tan infames como pedir permiso para abrazar. Además me encanta ese intercambio de energía que sin importar la duración del abrazo, fluye de un lado a otro sin interferencia, con vida propia.
Ahora mismo me gustaría tenerte a mi lado para poder abrazarte ya sea por tu necesidad o por la mia que casi son la misma cosa. Si un dia me vez, no importa ni el tiempo ni el lugar, abrázame, ten por seguro que estoy esperándolo para saber que estas bien, para saber que estoy bien. No importa lo que pase en tu vida en ese instante, ni lo que tenga mi vida en su baggage, lo que importa es que no pasen muchos años sin que te abrace.
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