Hace tiempo que no hago más ejercicio que el que implica subir las escaleras para llegar a mi oficina, pero ahora que voy volando a los 40tas pues como que le entran a uno las ganas de llegar en las mejores condiciones posibles.
Por tal motivo esta semana tramité mi membresia para una alberca que está a tres minutos de mi casa, y desde el martes acudo puntualmente a mi cita con el agua. Exactamente a las 6:10 estoy ingresando a ese maravilloso paraiso personal que es una alberca amplia y sola. Nadie mas en sus aguas, solo el salvavidas y un señor de mantenimiento, pero ellos obviamente solo observan desde afuera.
Mi plan es ir de martes a viernes durante todo lo que dura el verano, espero no fallarme.
La primera prueba fue justamente el primer dia, todo esperaba, menos que fuera a ser un dia nublado, lluvioso y un poco frio, pero aún así me valió y me metía a nadar, eso si, parecia que me estaban clavando alfileres en el cuerpo por lo frio del agua, pero como a los 5 minutos ya no se sentia nada, literalmente nada.
Despues de ese helado recibimiento los demás dias han transcurrido con relativa facilidad.
A lo largo de 40 minutos le doy varias vueltas a la alberca, algunas caminando, otras gateando y una que otra hasta nadando. ja!
No cabe duda que el agua tiene exclusivos poderes relajantes. Ahí sumerjido pareciera que no pasa nada en el exterior...
No cabe duda que el agua tiene exclusivos poderes relajantes. Ahí sumerjido pareciera que no pasa nada en el exterior...
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